SEIS CONSEJOS PARA EVITAR PROCRASTINAR Y NO FALLAR EN EL INTENTO
“Procrastinar genera ciertas respuestas del organismo, las cuales lo hacen entrar en un estado de alerta. Tal vez es por eso que hay personas que dicen que trabajan mejor bajo presión, pero lo que ignoran es que estos niveles de estrés tan recurrentes generan enfermedades”, asegura Viviana Carolina Zapateiro, profesional en psicología adscrita a Colsanitas.
Zapateiro comenta que, actualmente
nos encontramos en un entorno en donde cada vez todo es más automatizable,
rápido e instantáneo. Eso mismo hace el cerebro, agiliza los procesos para
desarrollar las tareas de una manera funcional y ágil. Cuando las personas se
enfrentan a situaciones complejas o tareas que reconoce le van a tomar mucho
tiempo, el cerebro reacciona de modo evitativo, por eso percibe este tipo de
actividades como aburridas y difíciles.
Para la profesional en
psicología, existen 6 acciones relevantes que se deben frenar si se quiere
evitar la procrastinación.
1. Las
distracciones: esta acción es la que más
aleja a las personas de cumplir ciertas tareas. Conocida como una saturación
cognitiva, la procrastinación lleva a las personas a preferir estar pendientes
de las redes sociales o de actividades que no tienen relevancia, en vez de hacer
los deberes. Por ello, es importante saber administrar el tiempo y mantener un
espacio libre y tranquilo que impulse a trabajar en los proyectos; repentinamente,
se deben hacer pausas activas para no estar en una misma posición durante mucho
tiempo y evitar aburrirse de los deberes.
2. El
fracaso: algunos pensamientos pueden
predisponer o atrasar el proceso de las actividades, ya que el cerebro genera
una sensación de dificultad. Estos pensamientos negativos están directamente relacionados
con el aplazamiento de los deberes, porque el cerebro se siente en peligro
debido a la dificultad. Confíe en su talento, mentalícese las victorias que
puede tener. También, puede optar por buscar ayuda psicológica para que pueda
moldear los pensamientos, fortalecer la autoestima y la seguridad para
enfrentar los retos de manera más positiva.
3. Organice
las tareas: la clave para que un día
rinda y no se olvide de ninguna tarea es la organización. Es importante que las
actividades estén divididas en partes que requieran esfuerzo y tiempo. No
olvide aclarar las fechas de entrega y, durante estas acciones, haga espacio
para las pausas activas.
4. Mejore
sus hábitos: una forma de entrenar el
cerebro se basa en los buenos hábitos. Cree retos físicos y mentales con
actividades de ocio para lograr estos objetivos, de esta forma evitará la
rigidez cognitiva y mejorará la creatividad.
5. Trabaje
en equipo: apoyarse en un equipo de
trabajo ayuda a tener más herramientas y, muchas veces, a realizar mejor las
tareas. Adicionalmente trabajará en las relaciones interpersonales, en la
autoconfianza y, muchas veces, fortalecerá sus capacidades de liderazgo.
6. Cree nuevas motivaciones: el desarrollo de algunas tareas puede convertirse en algo tedioso si así se desea. Si le cuesta realizar algunas tareas cotidianas le gustará obtener alguna recompensa cada vez que las adelante o las realice. Este método mantendrá sus ganas de finalizar un proyecto, mejorará sus hábitos y lo hará más disciplinado a largo plazo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario