● Con el objetivo de promover una vejez saludable, segura y activa, EPS Famisanar comparte una serie de recomendaciones para el cuidado integral de los adultos mayores, haciendo énfasis en la prevención de riesgos, la atención a enfermedades crónicas y la importancia del acompañamiento físico y emocional en esta etapa de la vida.
Promover el envejecimiento activo,
es decir, la capacidad de independencia de los adultos mayores, es vital para
prevenir ciertas enfermedades que se pueden presentar en esta etapa. Por esto, Cristina Rodríguez, Profesional de Gestión
de Riesgo Primario de EPS Famisanar recomienda una serie de acciones que se
pueden implementar en el hogar para seguirlos involucrando en la vida familiar
y que no sean vistos como una carga. “Cuando vivimos con adultos mayores o
nuestros abuelos, es recomendable involucrarlos en las labores cotidianas o
conversaciones habituales que tengamos como familia. Somos los cuidadores,
quienes estamos a cargo de ellos y debemos promover su bienestar”, asegura
Cristina Rodríguez.
Además, la EPS recomienda:
asegurar el entorno donde viven para que sea accesible y libre de obstáculos;
establecer rutinas diarias que favorezcan su autonomía; brindar acompañamiento
emocional, mantenerlos activos y escuchados; supervisar la medicación, la
alimentación y la hidratación; y estimular la participación en actividades
físicas, mentales y sociales.
“Esta población puede estar
expuesta a diferentes situaciones que ponen en riesgo su salud como las caídas,
por pérdida de fuerza o visión, la soledad, depresión y deterioro cognitivo,
incluyendo demencia. También, por el consumo excesivo de medicamentos sin
supervisión e incluso casos de maltrato o negligencia dentro del entorno
familiar”, agrega Cristina Rodríguez.
Del mismo modo, es necesario
asistir al médico lo más pronto posible si se perciben cambios repentinos en el
estado de ánimo, el comportamiento o la memoria. También, si se presenta
dificultad para caminar, mareo, caídas, pérdida del equilibrio o cambios en el
patrón de sueño o al momento de ir al baño. Se invita a los adultos mayores a
consultar al médico frente a síntomas como fiebre, dolor persistente,
dificultad para respirar o alteración del apetito.
Otras recomendaciones para sus familiares o
cuidadores:
EPS Famisanar asegura que para promover
el cuidado de estas personas se pueden instalar barras de apoyo en baños y
pasillos, eliminar tapetes sueltos, mejorar la iluminación, usar zapatos
antideslizantes y sillas con apoyo. Incluso adaptar espacios de uso frecuente
(cama, cocina, baño) para facilitar la movilidad.
En qué casos no se pueden dejar
solos a los adultos mayores:
● Cuando hay diagnóstico de
demencia moderada o severa.
● Si tiene alto riesgo de
caídas o movilidad severamente reducida.
● En presencia de
condiciones médicas inestables (oxígeno, nutrición asistida, sondas).
● Cuando hay antecedentes de
accidentes recientes, confusión o pérdida de conciencia.
●
Si no puede garantizar su autocuidado básico (comer, higiene,
medicación).
Por otra parte, en cuanto a la
alimentación de los adultos mayores, esta debe estar sustentada en alimentos
naturales como frutas, verduras, proteínas magras, legumbres y cereales
integrales. Se deben incluir alimentos como leche y queso que aportan calcio,
al igual que avena para mejorar el tránsito intestinal. En el caso de los
pacientes con enfermedades de base como diabetes, hipertensión, enfermedad
renal, entre otras, deben seguir estrictamente las recomendaciones de sus
médicos tratantes.
Para los adultos mayores con enfermedades crónicas o
condiciones de base, se recomiendan cuidados especiales que ayuden a mantener su
estabilidad y bienestar general:
●
Cumplir rigurosamente con el esquema de medicamentos y los
controles médicos establecidos.
●
Hacer seguimiento constante a signos de alarma o posibles
descompensaciones.
●
Ajustar la alimentación, la actividad física y la rutina diaria
según lo indique su condición médica.
●
Promover el autocuidado dentro de sus capacidades físicas y
cognitivas.
● Mantener actualizadas las
vacunas, en especial contra influenza, neumococo y COVID-19.
Finalmente, para promover la
agilidad mental de los adultos mayores se pueden realizar actividades como
lectura, sopas de letras, juegos de memoria y crucigramas. Hablar con ellos,
invitarlos a participar en actividades familiares y sociales, enseñarles a usar
la tecnología, dejarlos tomar sus propias decisiones e incorporar dinámicas que
estimulen su mente de forma amable, son acciones clave para contribuir a un
envejecimiento activo y saludable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario